El Albo de Río Grande, que prevaleció (10 a 6) en la primera final jugada hace poco más de una semana en el Club San Martín, estuvo en este segundo juego a poco más de cuatro minutos de quedarse con el título, cuando ganaba por 5 a 4, pero de la mano de Gonzalo Rodríguez y Sebastián Delfor, JUF lo dio vuelta con autoridad y defendió con firmeza para quedarse con la victoria.
El arquero Franco López, otro de los destacados, se quedó con un tiro libre sin barrera y la última posibilidad del Albo de empatar para forzar al alargue, a un minuto de final.
Juventud Unida Fueguina arrancó decidido a empatar la serie, luego de haber caído en el San Martín, y abrió el marcador a los cinco minutos, para luego ponerse 2-0 (doblete de Delfor).
Sin embargo, Lucas Ruiz ingreso no solo para aportar solidez y equilibrio, sino que también descontó, en tanto que Franco Velásquez, a segundos del entretiempo, igualó 2 a 2.
De manera arriesgada, Juventud cedió la iniciativa y Sportivo la tomó con mucha autoridad, inclinando la cancha, manejando los tiempos y llegando con mucho peligro.
Así, Lucas Ruiz descontó con un certero zurdazo cruzado y sobre los 10 minutos, Daniel Torres recibió por la banda izquierda y clavó un derechazo esquinado para empatar el cotejo una vez más.
Ese fue el momento de mayor tensión, cuando el Albo se quedó, y JUF comenzó a crecer, aunque los dos contaban con chances. Si bien Juventud llegó a la quinta infracción de equipo, Sportivo perdió mucho más con la doble amonestación de Ruiz, y luego de una infracción inexistente, Walter Alvarado convirtió de tiro libre sin barrera.
A poco más de cuatro minutos para el final, Sportivo ganaba 5 a 4 y debía mantener ese resultado para ser campeón, pero erró al momento de liquidarlo y luego JUF no perdonó.
Gonzalo Rodríguez igualó 5 a 5, y a dos minutos, un remate potente de Eloy Arposio tuvo rebote capitalizado por Delfor, para el delirio de JUF, que lo daba vuelta en poco tiempo.
La alegría fue mayor aún luego de la atajada de Franco López sobre Alvarado, en un tiro libre sin barrera a poco más de un minuto, y luego de los últimos segundos de sufrimiento, los dirigidos por Edgardo Suero tuvieron el premio por nunca bajar los brazos, con el pitazo final que los mantiene con vida en la lucha por el título de campeón de la divisional.
La figura: Sebastián Delfor
