En la reunión de la Federación Fueguina de Futsal, el tribunal de disciplina leyó las sanciones dispuestas luego de los informes arbitrales del fin de semana.
En primer término, Omar Riquelme (Unión Fueguina) deberá cumplir una sanción de (2) dos fechas por comportamiento antideportivo en el encuentro ante Metalúrgicos, en el cual se dirigió en malos términos hacia sus ex compañeros que hoy se desempeñan en el elenco dirigido por Alejandro Robles. El propio Alejandro Robles (DT de Metalúrgicos) también fue suspendido por 5 fechas, por un informe que se le realizó finalizado un encuentro de su equipo en categoría Juveniles.
Además, Marcelo Aguilar (ayudante de campo de Pingüino Futsal) fue suspendido por dos fechas, debido a que sin pedir autorización a los árbitros, intentó cambiar de balón de juego (se estaba jugando con uno blanco con gajos rojos -oficial enviado a la Triple F y con sello CAFS-, similar al oficial naranja con gajos negros, pero con más pique que el habitual).
Esto le valió al ayudante de campo una advertencia en primera instancia y una tarjeta azul directa (expulsión) en una segunda instancia, aunque sin lugar a dudas el informe posterior pareció exagerado.
Finalmente, desde la presidencia del Club Godoy Cruz, Juan Ponce emitió un comunicado pidiendo por la reducción de la sanción emitida contra Maximiliano Adasme, jugador del Tomba, el cual fuera expulsado en el partido que su conjunto jugó frente al Santo Verdinegro.
Adasme recibió cinco fechas y, según el árbitro del match, Julio Gonzale, una vez juzgada la expulsión, el jugador insultó en varias oportunidades desde la tribuna. El comunicado, en tanto, pidió por una reducción de pena, teniendo en cuenta el arrepentimiento del futbolista y la falta de antecedentes del jugador en cuestión.
