En primer turno, Santo Verdinegro, protagonista del
triangular final del 2011, contó con el aporte del goleador de la pasada
temporada, Cristian Gonzale, y de Demián Silva; tres goles cada uno, para el
primer triunfo de los dirigidos por Alfredo Moya, sobre el elenco tombino, que
ahora es dirigido por Ricardo Uribe.
El primer empate
El encuentro estelar de la noche medía a dos equipos con
buenas estructuras y grandes expectativas para la presente temporada. Pingüino
Futsal, con caras nuevas como la de Esteban Núñez (ex-Metalúrgico) y Jorge
Barría (ex-Sportivo), en tanto que por el lado de los dirigidos por Alejandro
Robles, un radical cambio de plantel: jugadores que quedaron libres ante la
baja de Los Cuervos de Río Grande, Fernando Suarez, Rodrigo Guinio, Gerardo
Ullúa y Walter Cote Mansilla, los jóvenes Leandro Vera, Leandro López y
Maximiliano Mikel provenientes de Italiano, además de Matías Saldaño (ex
–Pingüino Futsal) y Nicolás Bazán.
El encuentro fue parejo, con Pingüino adelantandose con un
tanto de Esteban Núñez. El equilibrio se mantuvo hasta la igualdad de Lucas
Vera, porque con goles de Martín Gallardo y Gustavo Almonacid, los conducidos
por Pablo Urrea se irían 3-2 al vestuario, tras el descuento de Maximiliano
Mikel, y antes que Ulises Alvarez contuviera un tiro libre sin barrera, sobre
la parte final.
Para el arranque del complemento, Metalúrgico le agarraba la
mano al partido, y empataba con una conquista de Leandro Vera.
Damián Mercado puso nuevamente en ventaja a Pingüino, pero nuevamente
Mikel igualó, y Cote Mansilla puso por primera vez a Metalúrgico al frente del
marcador.
A tres minutos del final, tras el empate transitorio de
Martín Gallardo, Mikel dejó el marcador 6-5 para los de Robles, a falta de 3
minutos, pero Juan Manuel Vera, en el minuto final, dejó el 6-6, que sería el
resultado definitivo.